El precio de juzgar...
26 de agosto de 2013 a la(s) 11:56
Hay quien se pasa la vida juzgando a los demás según sus propios desarreglos.Estas personas cuando juzgan no definen al juzgado, sino que se definen así mismas como alguien que necesita juzgar para seguir viviendo su irrealidad.
Creen tener soluciones para todos aconsejando lo que ellos no son capaces de realizar, por eso cuando opinan juzgan, pero esa relación de no-poder que les crea la ilusión de ayudar a los demás, a la vez les impide ayudarse a a sí mismos, produciendo una dependencia malsana de su propia fantasía.
La relación con ellos es peligrosa para tu sistema emocional, puesto que esas vibraciones tan densas llegan a crear desarmonía en su relación con ellos. Se conocen porque tienen tendencia a intentar resolver todos los problemas de los demás, siempre bajo la base de juicio, para así intentar encontrar una solución a su caos interno.
No pidas nunca a un ciego que te ayude a pasar el semáforo…
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