2 de febrero de 2012

UN BUEN CAFÉ




¡Hola compañeros viajeros en el tiempo!
Había una vez...
Un grupo de profesionales, bien situados, fueron a visitar a su antiguo profesor ya jubilado. Despues de pasar revista a sus recuerdos y al stress de que les producian sus actuales trabajos, el viejo profesor les ofreció un café.
Vino de la cocina con una bandeja llena de varias tazas de distintos materiales y colores, de porcelana, de vidrio, de plástico, etc...
Cada uno escogió una taza de café. Se miraban unos a otros con curiosidad.
El viejo profesor les dijo: Se habrán dado cuenta que las tazas que primero se han agotado son las más caras y bonitas, y las que han quedado en la bandeja son las más sencillas y baratas. Es natural cada uno elije para si lo mejor. Pero a la vez ese es el origen del stress que sienten en su vida diaria. La bondad de la taza no le ha añadido calidad al café.
En realidad era café lo que querian, no la taza. Se distrajeron con la taza y además envidiaron las tazas de café de los demás que eran mejor que las suya.
¡Se olvidaron de saborear el café!
El café es nuestra vida, la taza es el dinero, la casa, el coche, etc... lo que adorna al café. Nos olvidamos de nuestra vida interna y nos distraemos con las cosas que nos rodean y que queremos poseer.
Las personas no somos más felices por lo que mejor tenemos, pero si llevaremos la felicidad a nuestra vida si con lo que tenemos hacemos lo mejor que sabemos.
¡Os invito a un buen café bien cargado! ¡Ah, y olvidaos por un momento de la taza!
Con mis mejores deseos de Paz Profunda
Sagoan

No hay comentarios:

Publicar un comentario