10 de febrero de 2009

LA ALKIMIA DE LA FELICIDAD


RENUCIA Y ACEPTACCION/RECORDAR LA MENTE SUPERIOR


Los sentimientos reprimidos afectan a nuestra salud emocional y física. Las alteraciones emocionales generan toxinas muy poderosas.

Para tener calidad de vida debemos alimentar las emociones positivas y expresar nuestros sentimientos con libertad.

Cada uno de nuestros pensamientos afecta químicamente a nuestro cuerpo en fracciones de segundo. Cuando, por ejemplo, nos encontramos en la calle con una persona que no queríamos ver, la mente provoca reacciones instantáneas a nivel corporal y emocional.

La conexión entre la mente y el cuerpo es tan estrecha que a veces cuando queremos evitar alguna situación, nuestro subconsciente trabajará para que esto se realice de acuerdo a las creencias que tengamos implantadas. Nuestro sistema de creencias y expectativas puede mantenernos sanos o enfermos dependiendo de los patrones o programas que nuestro subconsciente tenga implantados.

¡NOS MERECEMOS ESTAR SANOS EMOCIONAL Y FISICAMENTE!


Muchos tenemos implantado el patrón de la enfermedad, porque enfermar es una manera de LLAMAR LA ATENCION, para algunos es la única. Si no superamos este patrón podemos pasarnos toda la vida enfermos.

Nos han acostumbrado a pensar que LA SALUD ES LA FALTA DE ENFERMEDAD….. ¡ FALSO!

De la misma forma que la oscuridad es la ausencia de luz, porqué la oscuridad la podemos anular con la luz pero nunca a la inversa,

LA ENFERMEDAD ES LA AUSENCIA DE SALUD.

Si no nos queremos a nosotros mismos, si no nos gusta nuestro trabajo o no vivimos la vida que queríamos vivir, en resumen SI NO NOS ACPTAMOS a nosotros mismos o a nuestro entorno, estamos dando pautas a nuestra mente diciéndole que no queremos estar aquí, que no nos gusta vivir aquí, que nos gustaría irnos de aquí, por tanto nuestro cuerpo, que está en permanente conexión con la mente, obedece a este requerimiento e intenta hacernos salir de lo que nos desagrada con procesos de aniquilación.

Con esto quiero decir que la primera solución que el cuerpo aporta es la enfermedad. Si persiste el deseo de no vivir la solución final es la muerte física.A través de tus pensamientos y emociones decides lo que debe de ser tu cuerpo. La mente es el arquitecto del cuerpo y el cuerpo es un reflejo de nuestros pensamientos.

Nuestros miedos, iras, rencores, emociones reprimidas, etc. se reflejaran en tu cuerpo.
La enfermedad emocional se transforma en enfermedad física.

“El que no aprende con conocimiento aprende con dolor” lo dijo un gran Maetro.

Debemos aceptar el dolor como proceso de aprendizaje, como efecto de una causa que no hemos tratado de acuerdo con las leyes del universo.

El dolor físico es una alarma que nos avisa de lo que debemos y no debemos hacer.

El dolor emocional funciona de una forma similar, si alguna circunstancia que se pone en nuestro camino nos duele o nos preocupa, es un mensaje claro para inducirnos a actuar de modo diferente a como lo estamos haciendo.

Por ejemplo, el dolor, que con frecuencia tenemos, de sentirnos decepcionados o abandonados por personas en las que hemos puesto nuestra confianza, nos está enseñando que tenemos que amar sin exigir nada a cambio o que nuestra autoestima tiene que estar por encima de estas emociones. Si aún así continuamos con la misma actitud, el dolor cada vez será mas intenso hasta que aprendamos.
El renunciar al “querer para nosotros mismos” y abrir los brazos para compartir con los demás, que también somos nosotros, es el gran secreto del arcano de nuestra existencia.

Mis mejores deseos de Paz Profunda


Sago-an

No hay comentarios:

Publicar un comentario